Como mentora en estrategia empresarial, he presenciado de primera mano cómo la promesa de la transformación digital ha encendido las luces de la innovación en muchas organizaciones. Sin embargo, también he visto cómo esa promesa se desvanece en el aire, dejando tras de sí proyectos fallidos y recursos desperdiciados.
Una estrategia de transformación digital es un plan integral que detalla cómo su organización incorporará soluciones tecnológicas en todos sus procesos. Esta estrategia tiene como objetivo ayudar a alcanzar el máximo potencial en cada una de las áreas de su empresa. Cuando se completan con éxito, los esfuerzos de transformación digital mejoran la eficiencia y la colaboración empresarial, lo que conduce a mejores velocidades de entrega y una mayor satisfacción del cliente.
Simplemente introducir tecnología en funciones comerciales existentes o renovar digitalmente las operaciones tradicionales no significa que se haya realizado una transformación digital exitosa. Una iniciativa genuina requiere inculcar una cultura empresarial que dé prioridad a lo digital. Sólo entonces una empresa podrá obtener los beneficios de la transformación y convertirse en una empresa más ágil y competitiva.
En esta publicación, exploraremos las razones detrás de los fracasos en las transformaciones digitales y ofreceré prácticas novedosas y fáciles de seguir para evitar que tu organización caiga en esta trampa.
Antecedentes del mundo y la revolución digital
Desde la aparición de internet hasta la explosión de las redes sociales y la inteligencia artificial, el panorama empresarial ha evolucionado a pasos agigantados. Con la llegada de internet, se abrieron nuevas posibilidades para las organizaciones. La capacidad de enviar correos electrónicos, compartir documentos en línea y acceder a información instantánea transformó radicalmente la forma en que se realizaban las operaciones comerciales. Las empresas comenzaron a utilizar sitios web para llegar a clientes potenciales en todo el mundo, ampliando así su alcance y su mercado objetivo.
La explosión de las redes sociales marcó otro hito en la evolución digital. Plataformas como Facebook, Twitter e Instagram permitieron a las empresas interactuar directamente con sus clientes de una manera más personalizada y en tiempo real. Esto no solo cambió la forma en que se llevaba a cabo el marketing, sino que también creó nuevas oportunidades para la generación de leads, el servicio al cliente y la construcción de marca.
Finalmente, la inteligencia artificial (IA) está revolucionado la forma en que las organizaciones procesan y utilizan datos. Desde la automatización de tareas repetitivas hasta el análisis predictivo y la personalización de la experiencia del cliente, la IA ha creado nuevas fronteras para la eficiencia y la innovación empresarial. Las empresas que adoptan la IA pueden tomar decisiones más informadas y anticiparse a las necesidades del mercado con mayor precisión.
Razones por las que fracasan las transformaciones digitales
Las organizaciones subestiman la magnitud del cambio requerido y no logran involucrar adecuadamente a todos los niveles de la empresa. Además, la falta de una visión clara y de liderazgo comprometido puede llevar a la falta de dirección y cohesión en los esfuerzos de transformación. La sobrecarga de información y la incapacidad para priorizar proyectos también contribuyen a la confusión y al estancamiento.
Una transformación digital fallida suele producirse por uno de los tres motivos siguientes:
La regresión ocurre cuando una empresa intenta transformarse e innovar digitalmente, pero adopta una tecnología que debería tener hace años, lo que garantiza que aún se mantenga rezagada respecto del mercado.
- El bajo rendimiento se produce cuando una empresa no se centra adecuadamente, ya sea al subutilizar las soluciones digitales, al subfinanciar el esfuerzo, o ambas cosas. A menudo la empresa sigue beneficiándose, pero en menor escala.
- Las iniciativas digitales fallidas ocurren cuando las empresas intentan introducir un nuevo producto o servicio digital, pero fracasan, lo que las obliga a descontinuarlo.
Estas son las principales razones por las que se producen estos resultados adversos:
Mentalidad incorrecta
En esencia, la transformación digital consiste en reinventar la forma en que operan una organización y sus empleados. Si los empleados se resisten al cambio que trae transformación, el esfuerzo estará condenado al fracaso desde el principio.
Tener la cultura equivocada
La transformación digital no puede ocurrir a menos que la cultura de una empresa adopte los nuevos productos, operaciones o tecnología con los que trabajará. La falta de espíritu de colaboración es uno de los mayores obstáculos para el éxito. La transformación digital requiere que diferentes funciones y equipos empresariales colaboren de forma más coherente y eficaz. La gestión eficaz del cambio puede ayudar a los empleados o grupos empresariales que dudan en adoptar la transformación digital a través de la formación y la educación.
Contratar a los empleados equivocados
Tan pronto como su organización se comprometa con la transformación digital, la contratación debe reflejar estos esfuerzos. Reclutar talentos con habilidades, experiencia y conocimientos en nuevas tecnologías es esencial. Estos empleados suelen estar más abiertos a las inversiones digitales que los empleados que llevan mucho tiempo en una empresa.
Metas poco claras
La tecnología por el bien de la tecnología es una noción que condenará al fracaso las iniciativas de transformación digital. Debe comprender claramente cuál desea que sea el resultado comercial. ¿Es una mejor colaboración? ¿Tiempos de entrega más rápidos? ¿Prácticas comerciales más ágiles? ¿Nuevos canales de ingresos?
Cualquiera que sea la motivación detrás de completar una transformación digital, las empresas deben definir objetivos claros. Sin ellos, alinear los departamentos e inculcar la cultura digital que necesita para tener éxito será un desafío.
¿Cómo evitar el fracaso de la transformación digital?
Para evitar caer en las trampas comunes de las transformaciones digitales, es fundamental adoptar un enfoque integral y centrado en las personas. Ahora que conoces los principales obstáculos que pueden interferir o incluso sabotear los esfuerzos de transformación digital. A continuación, es vital comprender las tres cosas que cualquier empresa debe tener para lograr una transformación exitosa:
Liderazgo fuerte: la transformación digital solo puede tener éxito con la aceptación de los empleados en todos los niveles. Sin embargo, es fundamental contar con buenos líderes que comprendan los objetivos comerciales de la transformación digital. Aquí hay cinco cualidades que hacen que los líderes sean exitosos en transformación digital:
- Entienden el valor y la influencia de la gestión del cambio.
- Necesitan tener una excelente comunicación.
- Están dispuestos a ser transparentes.
- Pueden describir el valor de lo que esta transformación digital aporta a la organización y a los empleados y equipos individuales.
Crear una cultura de innovación: Si su cultura no fomenta adecuadamente las iniciativas de transformación digital, los empleados no las tomarán en serio, lo que resultará en su fracaso. Con demasiada frecuencia, las empresas invierten mucho en soluciones excepcionales que quedan en el camino cuando los empleados se niegan a utilizarlas. Una vez que la cultura de una empresa sea adecuada para la transformación digital, el resto de la estrategia se implementará.
Identifique el objetivo empresarial: La transformación digital es costosa para casi cualquier negocio. Debido al capital necesario para hacerlo bien, los líderes a menudo se distraen con soluciones brillantes que no ayudarán a su empresa ni se acercarán a lograr un objetivo comercial crítico.
Los pasos descritos anteriormente te ayudarán a evitar los obstáculos que pueden provocar el fracaso de una iniciativa de transformación digital. Recuerda que la transformación digital es un viaje, pero no uno que deba emprenderse por el simple hecho de hacerlo.
Al comprender las razones detrás de los fracasos en las transformaciones digitales y adoptar prácticas centradas en las personas, las organizaciones en Chile pueden allanar el camino hacia un futuro digital próspero. Es hora de abrazar el cambio y liderar la revolución digital en el mercado empresarial chileno.